Las Provincias apelan cada vez mas a impuestos locales. Proliferan incluso en los municipios un número creciente de tasas. Las jurisdicciones locales en vez de competir reduciendo la presión tributaria exhiben un comportamiento inverso y apelan a aumento de las alícuotas, generalización y ampliación de la base imponible y tributos de indoles diversas.
Casi todas las Provincias gravan con alícuotas diferenciales del impuesto a los ingresos brutos si la venta del mismo bien proviene de una empresa provincial o extra provincial. Se argumenta incluso una suerte de protección o tratamiento preferencial de sus habitantes y empresas locales. Resta discutir en estos casos si tales actitudes no configuran verdaderas aduanas interiores y entran en conflicto con normativas vigentes, la ley de coparticipación federal incluso, o, también, colisionan con el régimen federal de gobierno y la convivencia armoniosa entre la Nación, las provincias y los municipios. Sigue leyendo