La economía argentina creció a partir de 2003 a mas del 8 % anual durante cinco años. Se desaceleró drásticamente en 2008 y 2009 y se recuperó en los dos años siguientes para luego mantenerse relativamente estancada. En este lapso sin embargo las estadísticas del Indec fueron fundadamente cuestionadas, la disputa política en torno del crecimiento adquirió elevada virulencia y se produjeron tres elecciones presidenciales. La administración saliente en 2015 elaboró a partir de 2007 uno de sus mejores argumentos en defensa de su política que reiteró hasta en la campaña presidencial de las elecciones de 2015 a pesar del estancamiento post 2011: la política económica instrumentada había sido capaz de provocar un crecimiento a tasas muy elevadas, ” tasas chinas”[1], y, lo mas importante para la volátil economía doméstica a lo largo de mas de cien años de estadísticas oficiales, la tendencia había sido persistente y sin interrupciones: “…en los últimos doce años Argentina tuvo el mayor crecimiento sostenido durante el período más prolongado de su historia económica..” (Axel Kicillof, candidato oficialista a diputado nacional, entonces Ministro de Economía de la Nación)[2]. El respaldo estadístico de esta afirmación estaba en las estimaciones del PBI realizadas por el Indec, profusamente cuestionadas, que para el lapso 2002/2015, trece años de expansión continuada de acuerdo al Indec de aquél entonces, arrojan un crecimiento del 98 % a una tasa acumulativa anual entre extremos del 5,4 % anual[3].
El Indec con su nueva administración iniciada en diciembre de 2015 ha publicado recientemente una nueva estimación del PBI para el período 2004/2015, no una revisión de las cuestionadas estimaciones anteriormente realizadas sino una nueva estimación[4]. Surgen de ellas: 1) el crecimiento de la economía argentina entre 2002 y 2015 ha sido sustancialmente menor: 76 % a una tasa de crecimiento acumulativa anual del 4,5 %; de acuerdo a estos valores, el Indec administrado por las autoridades salientes en diciembre de 2015 habría sobreestimado el crecimiento casi en un 30 %; 2) el PBI del año 2009 tuvo una caída muy pronunciada ( -6 %) y consecuentemente las expansiones de los dos años siguientes ( 10.4 % en 2010 y 6.1 % en 2011) partieron de una base muy reducida; 3) en los últimos cuatro años la economía argentina asistió a un evidente estancamiento y apareció en forma manifiesta su debilidad estructural de larga data resumida por los especialistas en la expresión ” pare y siga”: el PBI cayó en 2012 ( -1.1 %), creció en 2013 ( 2.3 %), volvió a retraerse en 2014 (-2.6 %) y se recuperó en 2015 (2.4 %); 4) el nivel de vida de la población decreció significativamente en los últimos cuatro años y su ingreso por habitante promedio se contrajo casi un 2,5 %. Aún de acuerdo a las estimaciones realizadas por las anterior administración del Indec el PBI por habitante en términos reales del año 2015 fue sólo 3 % mayor que el de 2011.
¿Fueron chinas las tasas? ¿Ha sido el período de mayor y sostenido crecimiento de la historia económica?
De acuerdo al coordinador del Proyecto ARKLEMS Growth, Productivity and Competitivenes Project, Ariel Coremberg, el régimen económico imperante hasta 2015, al contrario de los cálculos oficiales, no alumbró el mayor período de crecimiento ni el más prolongado ni el único que creció a tasas chinas en los últimos cien años siendo Argentina, además, el país que menos creció a largo plazo de América Latina. Más precisamente, los principales resultados de esta investigación son:
a) Los períodos de mayor recuperación económica post crisis fueron: 1900/1913, 1917-1929, 1963/1974 y 2002/2014 según las estimaciones del Indec realizadas por las autoridades salientes en Diciembre de 2015;
b) El régimen económico vigente hasta diciembre de 2015 se destaca por la recuperación acelerada de la producción post crisis pero no es el último que presentó tasas chinas en el último siglo;
c) Las estimaciones del PBI para el período 2002/2014 realizadas por las anteriores autoridades del Indec arrojan un crecimiento del 92 % sobreestimando el “verdadero” crecimiento que fue del 64 % según sus propias estimaciones, consecuencia principalmente de manipulación discrecional de las series oficiales realizadas a partir de la intervención del Indec realizada en 2007;
d) Argentina fue el país que menos creció a largo plazo entre máximos cíclicos recientes 199872013 de América Latina;
e) La distorsión de las series oficiales se debe al abandono de las fuentes y métodos tradicionales de las cuentas nacionales producido a partir de 2007 y es producto de una manipulación discrecional directa antes que de una manipulación de tipo indirecta por aplicación de un índice de inflación que subestimó los verdaderos valores;
f) El PBI creció al 2,7 % promedio anual entre 1913/2014 y hubo varios períodos a lo largo de la historia que se observaron tasas chinas: 1917/1924, 1959/1961, 1963/1965, 1991/1994 y 2002/2007. Las recuperaciones mas largas y profundas fueron las de comienzos del siglo XX y el período que abarca los años 1950 hasta 1974. La depresión económica 1998/2002 fue la peor de la historia argentina superando en magnitud y duración los efectos negativos de la Primer Guerra Mundial, la crisis de 1929 y la década perdida de 1980;
g) La distorsión de los cálculos oficiales resulta notable en período 2002/2014 y se concentró a partir de 2007;
h) El período de crecimiento 1998/2013 presenta un crecimiento del 2,2 % por debajo de su tendencia de largo plazo. El régimen económico vigente hasta 2015 se destaca por una recuperación acelerada del nivel de producción postcrisis aunque generó un crecimiento de largo plazo inferior a otros períodos: 1987/1998/, 1951/1974 y 1944/1951.
i) El PBI per capita dejó de crecer a partir de 2008.
[1] El año 1976 es el último año que el PBI chino descendió ( – 1,6 %). Desde aquél año el crecimiento chino fue espectacular: tuvo sólo tres años que creció menos del 5 % anual, 16 años con tasas de dos dígitos y una “desaceleración” en los últimos cuatro años creciendo 7,70 % en 2012 y 2013, 7,3 % en 2014 y 6,9 % en 2015.
[2] Una defensa del argumento de las tasas chinas realizada en 2010 esta aquí y una crítica realizada en 2011 aquí. Argumentos a favor y en contra de la afirmación discutidos en 2012 pueden consultarse aquí. Argumentos a favor realizados en 2014 se pueden consultar aquí y un enfoque crítico de las estimaciones del PBI realizadas por el Indec hasta 2014 se encuentran por ejemplo aquí.
[3] Calculado en base a la tasa de crecimiento del PBI de 2015 ( 2,4 %) publicado en el Informe de prensa del Indec del 29/06/2016 ( Estimaciones provisorias del PBI para el Primer Trimestre de 2016), la metodología del Indec vigente hasta el informe de prensa del 19/09/2015 (Estimaciones provisorias del PBI para el Segundo Trimestre de 2015) y el PBI del año 2002 que surge del empalme de la serie a precios de 2004 y a precios de 1993.
[4] Indec, 29 de Junio de 2016. “Revisión del Producto Interno Bruto, base 2004 y series de Oferta y Demanda Globales. Año 2004-2015”.